Qué es el AQL?
En el mundo de la fabricación, el nivel de calidad de aceptación -AQL- por sus siglas en inglés es una herramienta fundamental para garantizar que los productos producidos cumplan con los estándares de calidad requeridos.
El AQL es el número máximo de productos defectuosos en un tamaño de muestra que una empresa está dispuesta a aceptar sin rechazar todo el lote de producción.
El AQL se utiliza para determinar el nivel de calidad de los productos que se producen en grandes cantidades. Se utiliza para probar una muestra de los productos y decidir si se debe aceptar o rechazar todo el lote de producción en función del número de defectos encontrados en la muestra. Este proceso a menudo lo llevan a cabo inspectores de control de calidad de empresas dedicadas a esto, ya que se quiere tener una imparcialidad en las mediciones y experiencia en determinar los errores.
Su importancia
El AQL es importante por varias razones:
- En primer lugar, asegura que el cliente reciba productos de alta calidad que cumplan con sus requisitos.
- En segundo lugar, ayuda a los fabricantes a reducir el costo de producción al minimizar la cantidad de tiempo y recursos dedicados a inspeccionar cada producto. Finalmente, ayuda a mantener la reputación del fabricante al garantizar que sus productos sean de alta calidad constante.
Las empresas deben usar el AQL porque es una forma efectiva de garantizar que sus productos cumplan con los estándares de calidad requeridos. Sin AQL, no habría una forma estandarizada de medir la calidad de los productos, lo que generaría inconsistencias y posibles problemas tanto para el fabricante como para el cliente.
Por ejemplo, supongamos que una empresa produce 10.000 teléfonos inteligentes. El AQL para este lote de producción se establece en 2,5 %, lo que significa que el número máximo de productos defectuosos en el tamaño de muestra de 500 es 13 (500 x 2,5 %). Si se prueba el tamaño de la muestra y solo se encuentran 10 productos defectuosos, se acepta todo el lote de producción. Sin embargo, si el número de defectos supera los 13, se rechaza todo el lote de producción y el fabricante debe corregir los problemas antes de volver a enviar los productos para su inspección.
Consideraciones importantes al momento de definir el AQL:
i) En la práctica, se distinguen tres tipos de defectos y para la mayoría de los bienes de consumo, los límites son:
– 0% para defectos críticos (totalmente inaceptable: un usuario podría resultar lastimado o las regulaciones son no respetadas). Por ejemplo, utensilios de cocina sin pruebas de laboratorio para determinar la inocuidad de la materia prima utilizada, o pintura con químicos no permitidos en el país de destino
– 2,5% por defectos mayores (estos productos normalmente no serían considerados aceptables por el usuario final y afectan la operabilidad del productp). Por ejemplo, botones no funcionales, pantallas quebradas o piezas con tamaños errados.
– 4,0% por defectos menores (hay alguna desviación de las especificaciones, pero a la mayoría de los usuarios no les importa). Por ejemplo, cajas de empaque sucias, tornillos sin apretar o una tonalidad ligeramente diferente a la solicitada.
Es importante definir con el fabricante el nivel de AQL al momento de realizar la compra para que éste haga los ajustes pertinentes a su proceso interno de control de calidad y cumpla con lo acordado al momento de una inspección pre embarque o al despachar los bienes.
ii) El cliente debe hacer un listado muy claro de lo que es permitido y lo que no, documentando con fotografías y ejemplos para reducir los errores de comunicación.
iii) El fabricante o proveedor debe dejar claro que entendió los requerimientos y que hará todo lo posible por llegar a esos niveles, si no superiores.
iv) El cliente debe tener en cuenta los tiempos de inspección y reproceso del lote, en caso de que el muestreo arroje niveles superiores a los permitidos y se requiera verificar nuevamente.
No recomendamos a nuestros clientes, obviar el tiempo requerido para reprocesar el lote, ya que despachar sin hacerlo ,podría conllevarlo a tener pérdidas mayores en el largo plazo. Los proveedores prefieren corregir los problemas en sus fábricas donde el costo es menor, que correr con gastos de reparación en destino, fletes áereos costosos, o el daño reputacional.
En conclusión, AQL es una herramienta esencial para que los fabricantes se aseguren de que sus productos cumplen con los estándares de calidad requeridos. Ayuda a mantener la consistencia, reducir costos y proteger la reputación del fabricante.
El siguiente diagrama puede ser útil para definir como proceder una vez que hay hallazgos en la calidad del producto al momento de la inspección pre-embarque

Las empresas compradoras deben conocer y utilizar el AQL para asegurarse de que sus productos sean de alta calidad, lo cual es crucial para mantener la satisfacción y lealtad del cliente y un control en los costos de garantías y logística.